Los préstamos personales son uno de los productos financieros que más se comercializan tanto en las empresas de capital privado como en los bancos de toda la vida. Sin embargo muchos clientes no terminan de comprender bien su funcionamiento. Por este motivo desde Prestamistas queremos explicarte qué son los préstamos personales y sus características. ¿Te gustaría saber más sobre este tema? En ese caso, continúa leyendo el siguiente post.

Qué son y cómo funcionan los préstamos personales

Cuando hablamos de préstamos personales lo hacemos para referirnos a aquel producto financiero por el cual una entidad de crédito ofrece una cantidad de capital a un usuario. El prestatario. El acuerdo obliga el prestatario por contrato a devolver la cantidad prestada más una tasa de interés en función del riesgo de la operación. También se suelen incluir en este importe los gastos que se derivan de llevar a cabo dicha operación financiera.

Cuáles son las características de los préstamos personales

Hoy en día en el mercado existen una gran variedad de préstamos personales. Esta gran diversificación pone a disposición de los clientes una gran cantidad de ofertas. Aunque hasta hace algunos años era un producto prácticamente exclusivo de los bancos, el estallido de la crisis abrió el nicho de mercado. En la actualidad las empresas de capital privado y los prestamistas particulares también ofrecen préstamos personales.

Y debido precisamente a la gran cantidad de ofertas es importante valorar bien este producto antes de contratarlo. Las recomendaciones de los expertos de Prestamistas al respecto son claras. Antes de decantarte por uno u otro préstamo personal es importante que te fijes en los siguientes aspectos:

  • El tipo de interés. Este valor es el precio que marca la empresa de crédito a cambio de prestarte el dinero. Se pueden revisar tanto la TIN (Tipo de Interés Nominal) como la TAE (Tasa anual equivalente). Para saber verdaderamente qué gastos acarrea nuestro préstamo personal lo más conveniente es estudiar la TAE, ya que es un valor mucho más completo.
  • Las comisiones que incluye el producto. Estas pueden ser de apertura y de cancelación. Dentro de las comisiones de cancelación hay empresas que cobran por la cancelación parcial y total.
  • Posibles gastos asociados.
  • Importe que deberemos pagar cada mes. Este se calculará en función del plazo de amortización seleccionado y de la TAE de la que disponga el préstamo.
  • Plazo de amortización.

La garantía dentro de los préstamos personales

Cualquier préstamo que solicitemos debe de ofrecer ciertas garantías al prestamista de que seremos capaces de devolver el importe junto con los intereses. En el caso de las hipotecas, por ejemplo, es la propia vivienda que adquirimos la que actúa como garantía del préstamo. Pero, ¿qué es lo que sirve como garantía en los préstamos personales? Pues, ahí va la sorpresa: todos tus bienes, presentes y futuros, servirán como garantía en caso de impago. ¿Qué significa esto? Que si en algún momento dado dejas de pagar las cuotas por falta de liquidez, la empresa de crédito tendrá derecho por vía judicial a embargarte las cuentas y obtener el dinero que le debes.

El problema de esta fórmula para el prestamista es que dichos bienes pueden ser mayores o menores dependiendo del prestatario. Por tanto el riesgo de impago que asumen las empresas de crédito es mayor. Debido a esta característica los intereses son más altos y los plazos de amortización suelen ser más cortos que los de otros tipos de préstamo. Por ejemplo los hipotecarios.

La finalidad dentro de los préstamos personales

Por norma general la finalidad para la que se solicita el capital suele ser relevante para las empresas de crédito que conceden préstamos personales. Aunque no tiene por qué haber problema con los motivos que te lleven a pedir un préstamo, sí que es cierto que los sopesarán. Es decir, que si pides 5.000 € para comprar un lavaplatos lo lógico es que te lo denieguen. Básicamente por falta de coherencia. Por tanto los importes que se solicitan han de ser proporcionales al tipo de gasto que queremos realizar.