Elegir un prestamista es una de las decisiones más complejas a las que nos deberemos de enfrentar con el paso de los años. Tarde o temprano es normal que debamos de solicitar ayuda financiera a alguna entidad. Por ejemplo para comprar una vivienda, para hacer frente a un gasto imprevisto o para adquirir algún otro bien. Como por ejemplo un coche.
Hoy en día, y tras la grave crisis de la que todavía estamos saliendo, existen muchas alternativas de crédito para particulares y empresas. Todas ellas parecen ofrecer los mejores beneficios para el cliente. Aunque esto no siempre es así. De ahí que sea normal que surja la siguiente duda: en qué hay que fijarse a la hora de elegir un prestamista. Los expertos de prestamistas te lo cuentan.
Cómo acertar a la hora de elegir un prestamista
Cuando hablamos de prestamistas lo hacemos para referirnos a aquella figura que se encarga de ofrecer capital a un particular o una empresa. Puede tratarse de entidades de crédito, como los bancos y cajas o las empresas de capital privado o de prestamistas particulares. Cada uno de estos perfiles cobra a cambio de su dinero unos intereses en función el riesgo que entrañe la operación. Además algunas de estas empresas incluyen otros gastos asociados. Desde productos vinculados a posibles penalizaciones en forma de comisiones por amortizar parcial o totalmente los préstamos sin haber llegado a término. Igualmente no todos están de acuerdo en asumir los mismos riesgos con su capital. Así, por ejemplo, los bancos y cajas no ofrecen préstamos a aquellos clientes cuya situación financiera no es envidiable.
Entre las cosas que has de mirar a la hora de elegir un prestamista destacan sin duda las siguientes:
Comparar, comparar y comparar
A día de hoy es normal que antes de adquirir un producto o servicio comparemos varios para ver cuál es el que se ajusta más a nuestras necesidades. Lo hacemos cuando vamos a comprar un electrodoméstico o cuando queremos realizar una obra en casa. En ese caso, ¿por qué no actuar del mismo modo a la hora de contratar un préstamo? Hoy en día puedes acceder a diversos compradores a través de internet que te ayudarán y facilitarán esta tarea.
Los intereses
Está claro que todos deseamos apostar por aquel préstamo cuyos intereses son más relajados. Peor no nos engañemos. Esto dependerá en gran medida de nuestra situación financiera. Siempre que tengamos un historial financiero intachable y suficiente capital para devolverlo, no habrá problema en elegir el préstamo con los intereses más bajos. Sin embargo la situación cambiar y se hace más delicada si económicamente no nos encontramos en nuestro mejor momento. En estas situaciones no todos los prestamistas te dejarán dinero. Y los que lo hacen tienen es lógico que quieran cobrar más por el mayor riesgo de impago que entraña la operación.
Lo mejor es que, te decantes por el prestamista que sea, pagues religiosamente cada una de las cuotas para evitar tener que abonar más dinero como penalización por los retrasos en los pagos.
Comisiones y productos vinculados
Lo mejor a la hora de decantarse por un prestamista es elegir aquel que no incluya ni comisiones ni productos vinculados. Por ejemplo si crees que con el tiempo podrás liquidar el préstamo más rápido, busca aquel prestamista que no cobre por amortización parcial o total anticipada. Igualmente ten cuidado con los bancos y cajas que suelen bajar los intereses a costa de añadir productos vinculados. Calcula bien antes de decantarte por estos productos pues es probable que las vinculaciones no te interesen y que, si haces números, caigas en la cuenta de que a la larga el préstamo va a ser más caro.